Hay dos cosas que son más que terribles cuando las piensas, cuando las imaginas, pero mucho peor cuando las vives: la espera y la separación.
Cuando era pequeña, tengo la imagen de que mi madre siempre me esperaba, porque tiendo a ser más lenta para hacer mis cosas, en ese momento no comprendía, pero hoy entiendo de que si a ella le molestaba eso, era realmente porque no es algo agradable, incluye una pequeña dosis de angustia, que hace sentir como que tu corazón no estuviera en el pecho, sino entre cuatro paredes, un lugar oscuro y estrecho, se va desesperando y le entra un vacío, una ansiedad, un ahogo que parece sempiterno.
Por otro lado, está la separación. Es una acción, es un suceso y por Dios que nos hace sufrir, porque todos los días vivimos una separación, incluso cuando vamos en el metro, estamos junto a tanta gente, pero cuando ellos se bajan en la estación que les corresponde, nos separamos, pero no es tan significativa como cuando uno de tus mejores amigos se va a vivir al otro extremo del país. Como cuando tu hermano tiene una oportunidad de trabajo en el extranjero y hasta ver maletas o agencias de viaje, te duele. Duele ver el peluche que te regaló, el libro que leyeron, el trozo de chocolate sobre el velador, duele la canción favorita y hasta volver a subirse a la misma micro en las mañanas, pero esta vez, sin ellos.
Me duele esperar, quizás hasta cuándo esperaré para que nos demos nuevamente ese abrazo, para que vamos por todas las calles caminando tomadas de la mano. ¿Caminaremos? ¿Nos encontraremos? ¿Te reconoceré? De veras que me duele haber olvidado el sonido de tu risa, cómo se ponían tus ojitos cuando sonreías, el olor de tu piel y la suavidad de tus manos. Extraño tanto que estemos juntas, que conversemos hasta que no importe la hora...¿qué dices si nos tomamos un tecito?
Extraño que alguien se preocupe y ocupe de veras de mí, extraño más que nada que seas tú. Quiero volver a verte. ¿cuándo acabará esta espera? ¿Por qué tan cruda, repentina la separación?
¿Me cantarás otra vez para despertarme?
Momento del día: Eres más que irremplazable.
sábado, marzo 25, 2006
A mi Madre I
By Mass 0 comentarios en 1:29 p.m.
miércoles, marzo 22, 2006
Not really
No realmente, no es todos los días que conoces a personas especiales que aportan magia a tu vida...
No realmente, no es a cada rato que andas burbujeando por ahí...
Y es que a veces echamos de menos la comodidad de ser espectadores.
Y es que el ser protagonistas todo el tiempo, no sólo cansa, además se vuelve monótono y te agota y vas de a poco siendo menos, cada día eres más responsable, cada día eres más fuerte, eres mayor, eres más adaptable y hasta llegas a transar porque no es malo sentirse de vez en cuando imprescindible...distinto...
No realmente, no extraño a aquellos que dejé atrás, sólo me siento con la carga moral de sentir algo por su ausencia. Pero cambia tanto la ausencia física a la espiritual, con el saber que me amas me basta, ¿Necesito acaso verte? ¿No basta y es más que suficiente que me hayas regalado esta noche estrellada?
¿Son tan necesarias acaso, las respuestas correctas todo el tiempo?
¿Es tan necesario seguir preguntando estas cosas?
Momento del día: Things are by faith and not by sight.....
By Mass 1 comentarios en 10:47 p.m.